Parece mentira pero, pese al camino que ha recorrido ya Android y productos tan perfectos como el Nexus 5 o el Moto G hay quienes dudan de la plataforma de Google.
Y no, no hablo de rentabilidad o futuro, eso nadie lo discute: Android es la plataforma con más presencia en el mundo de los smartphones a nivel mundial. Hablo de algunos estigmas que viene acarreando y que, pese a ser lógicos que se hayan fundado, son totalmente falsos. Prueba de ello, estos cinco prejuicios contra la plataforma de Google:
Android es inestable y lento
Sencillamente, esto es mentira. La culpa de que la gente crea que Android es lento es que, efectivamente, hay terminales de gama baja nada optimizados y con capas de personalización pesadas corriendo Android y dando una experiencia de uso desastrosa. Pero si nos vamos a la gama alta, difícilmente encontraremos un Android lento: terminales con tantísimo recorrido como el Samsung Galaxy S2 todavía responde con soltura (aunque con peros, obviamente) y no tiene problemas para mover la mayoría de aplicaciones.
Respecto a lo inestable del sistema, todos lo son en mayor o menor medida y Android no es una excepción. De hecho, estudios llevados a cabo en medios como Forbes señalan que Android es más estable que iOS.
La interfaz es fea
Esto es mentira y gran parte de la de la existencia de este mito la tienen los fabricantes (malditas capas de personalización) y en menor medida Google, que hasta la llegada de Android Ice Cream Sandwich estuvo muy por detrás de la competencia en lo que a interfaz se refiere. No sólo eso, las aplicaciones -tras la llegada de ICS- se han ido adaptando paulatinamente y -gustos a parte- se ha sabido implementar muy bien un flat design muy atractivo, como la gama Nexus lleva demostrando durante mucho tiempo.
Las baterías de los Android no duran nada
No son para echar cohetes, cierto, pero desde luego Android no está peor que cualquier otra plataforma. De hecho, hay terminales tan sobresalientes en lo que a batería respecta como el LG G2, líder indiscutible en este aspecto. Por no hablar del hecho de que los actuales gama alta con Android montan pantallas de 5 o más pulgadas, con el consecuente gasto de recursos que esto supone y, aún así, mantienen una autonomía bastante similar a la del iPhone 5s.
La gama baja no sirve para nada
Esto era verdad hasta hace muy poco, pero con la llegada del Moto G esto ha cambiado. Es cierto que muchos terminales Samsung y similares de menos de $200 han hecho mucho daño a la imagen del ecosistema, pero es cierto también que desde el primer Nexus, Google ha tenido la mejor oferta en relación calidad/precio.
La gama baja de Android va a ir mejorando cualitativamente en la medida que los fabricantes se den cuenta de cuál es la vía a seguir: la de Motorola. Hasta el momento había un lider (en lo que a calidad se refiere, no en ventas) indiscutible: el Nokia Lumia 520 pero el futuro de Google, con terminales como el Moto G y mejoras como las incorporadas en Kit Kat, es muy prometedor.
Es inseguro
No lo es tanto como dicen. Lo cierto es que noticias como la de una aplicación de linterna que te suscribe a servicios de pago sin notificarte no ayuda a limpiar la imagen de la plataforma. Pero aún así, para la gran mayoría de los casos, basta con descargar sólo aplicaciones desde Google Play, saber qué permisos le estás dando a cada aplicación (no dar permisos para enviar mensajes a una aplicación de linterna, por ejemplo) y, en definitiva, tener un poco de sentido común.