Automáticamente en base a gestos y movimientos. Por ejemplo, la app enciende la pantalla al levantar el teléfono de la mesa o al sacarlo del bolsillo. Y apaga la pantalla ella sola al dejarlo sobre la mesa o al meter el teléfono en el bolsillo.
Para funcionar Gravity Screen Off utiliza los sensores de movimiento y de proximidad del teléfono. Tanto la versión gratuita como la versión de pago (1,19 €) tienen numerosos ajustes para adaptarlo a las preferencias de cada uno. Genial, útil y muy cómodo. Vía Redmond Pie.